Trastorno de ansiedad en niños: ¿Cómo identificarlo y tratarlo?

Es natural que los niños desde temprana edad tengan miedos y preocupaciones que son típicos dependiendo de las edades, pero estos van desapareciendo a medida que van creciendo. Sin embargo, muchas veces estos miedos se vuelven persistentes y pueden estar relacionados con el trastorno de la ansiedad. 

 

¿Qué es el trastorno de ansiedad en niños? 

 

Según la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), la ansiedad es: “un mecanismo adaptativo natural que nos permite ponernos alerta ante sucesos comprometidos”.  

Igualmente, para la SEMI, hay 2 niveles de ansiedad:  

• Moderada: que se dispara cuando hay algún nivel de peligro y nos mantiene alertas para afrontar ciertos retos. 
• Desproporcionada: que puede presentarse sin vivir una situación de peligro, y puede afectar el desempeño psicosocial y fisiológico de una persona, interfiriendo en sus actividades usuales. Este nivel, según la SEMI, es el trastorno de ansiedad.  

Es importante saber que alrededor de  3 % de los niños de 6 años padecen este trastorno, evidenciando un porcentaje mayor en las niñas (10 %) que los niños (5 %). 

 

¿Cómo saber si mi hijo padece de trastorno de ansiedad? 

 

Cuando a lo largo de los años un niño mantiene los mismos miedos, o cuando son tantos temores que interfieren con sus actividades escolares o sus relaciones con su entorno, puede tratarse de un trastorno de ansiedad en niños. 

Según Jessica Mejía, directora del programa de Psicología de Areandina Valledupar: “los trastornos de ansiedad se caracterizan por causar preocupación y miedos extremos, lo que desencadena cambios en el día a día de los niños, afectando su alimentación, interacción social, sueño o estado de ánimo”. 

 

Tipos de trastornos de ansiedad 

 

Según la directora Mejía, existen varios tipos de trastorno de ansiedad, los cuales son:  

• Trastorno de ansiedad generalizada: este trastorno hace que los niños se preocupen constantemente por cosas diferentes. Les preocupan en extremo cosas comunes, lo cual dificulta que se relajen y diviertan, que coman bien y que concilien el sueño por la noche. 
• Trastorno de ansiedad por separación: es normal que los niños muy pequeños se pongan nerviosos y ansiosos las primeras veces que se separan de sus padres. Sin embargo, cuando con la edad no superan ese miedo se conoce como trastorno de ansiedad por separación.  
• Trastorno de ansiedad social: a los niños con este trastorno les genera temor lo que puedan pensar o decir de ellos. Una actividad grupal en el colegio les puede generar miedo extremo. 
• Trastorno de pánico: son ataques de ansiedad repentinos que pueden verse reflejados en síntomas físicos como temblor, aturdimiento o falta de aire. 
• Mutismo selectivo: es una forma extrema de fobia social y en ella, los niños suelen hablar en sus hogares, pero dejan de comunicarse en el colegio o en lugares en los que sienten miedo. 

 

Para la directora Mejía, algunos de los aspectos que desencadenan los trastornos de ansiedad son la genética, es decir, que alguno de los familiares sufra de lo mismo y de ahí salgan las conductas aprendidas, en las que se les enseñe a tener miedo. Asimismo, pueden ser ocasionados por aspectos de la realidad que hayan afectado profundamente al infante como la pérdida de algún ser querido, malos tratos recibidos o la escasez de algunos nutrientes cuya deficiencia pueda generar ansiedad. 

 

¿Qué hacer si mi hijo padece trastorno de ansiedad? 

 

La académica Mejía comparte los siguientes consejos para los padres que tienen hijos con síntomas de trastornos de ansiedad: 

• Lo primero y más importante es recurrir a un psicólogo para establecer un tratamiento profesional, seguro y eficaz. 

• Involucrarse en el desarrollo de las terapias de los niños y hacer seguimiento del avance junto al psicólogo que lo trate. 

• Hablar con el niño, ayudarlo a que comunique sus sentimientos de manera asertiva, sin juzgarlo. 

• Animar al niño a avanzar. Es de gran importancia contar con el apoyo y la motivación de sus padres. 

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Otras cosas que puedes hacer para ayudar a tu hijo 

 

1. Ayuda a tu hijo a manejar la ansiedad, no a controlarla. Lo importante es que le puedas enseñar a tolerar aquello que le detona la ansiedad.  
2. No evites totalmente las cosas que le generan ansiedad. Esto solo mejorará a corto plazo, pero no trabajará la raíz del problema.  
3. Alimenta su confianza. Dile que puede lograrlo, que va a estar bien, y que puede y es capaz de manejar determinada situación. Esto hará que poco a poco se sienta mejor y más confiado.  
4. Hazle sentir que respetas sus sentimientos, sin que esto signifique que los magnifiques. Por ejemplo, supongamos que a tu hijo no le gusta ir al pediatra porque le dan miedo las inyecciones. En este caso, debes decirle que entiendes su temor, que está bien sentirlo, y que estás ahí para apoyarle. Eso hará que sienta más tranquilidad.  
5. Sé el ejemplo: si ves que tienes un cuadro de ansiedad, trátalo con un psicólogo y busca las herramientas para que puedas trabajar en ti, sin empeorar la situación con tu hijo. 

 

Complicaciones del trastorno de ansiedad 

 

Como ya sabes, es importante que tomes acciones a tiempo o podrían desencadenarse problemas más fuertes como:  

 

Si notas que tu hijo está pasando por esto, recuerda que en Areandina estamos para ayudarte. ¡No están solos! 

Puedes comunicarte con nosotros y hablar con uno de nuestros especialistas para que tengas la atención que necesitas. 

• Bogotá: 7421934 Ext. 1285.  
• Pereira: 3402282 Ext. 2161.  
• Valledupar: 5897879 Ext. 3117  

Recuerda que también tenemos tips y herramientas para tu bienestar emocional las 24/7.  

 

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