Antes de que te preguntes cómo redactar un ensayo de forma correcta y busques miles de páginas que probablemente no te den la información que necesita, ¡buenas noticias! Continúa leyendo porque te te diremos de qué se trata, cuáles son cada una de sus características, qué contiene y por qué es tan importante en la vida académica. ¡Aquí vamos!
Para empezar es fundamental que tengas en cuenta que es un texto que evalúa y desglosa un tema específico en el que tú darás tus puntos de vista, también sustentado por otros investigadores que ya hayan comentado al respecto.
Por si no lo sabías, este tipo de creación de contenido escrito es considerado un género literario. Allí reflejas tu forma de pensar o la postura que tenga relación al tema que estás abarcando. Lo que haces es examinar, exponer y definir una postura que desees defender.
Ahora bien, la pregunta que probablemente te estés haciendo: ¿Cómo se empieza a redactar un ensayo? La respuesta es: por partes. Antes de comenzar a redactar es fundamental realizar una buena preparación que debe consistir en lo siguiente:
Lo primero que debes hacer es investigar a fondo el tema sobre el cual vas a escribir. Busca fuentes confiables y actualizadas como libros, artículos académicos y páginas web especializadas. Toma nota de los puntos clave, las citas relevantes y los ejemplos que puedas utilizar en tu ensayo. Cuanta más información tengas, más sólidos serán tus argumentos.
Una vez que tengas la información necesaria, es importante delimitar el enfoque de tu ensayo. Define claramente el objetivo que quieres lograr con tu escritura y establece los límites de tu investigación. De esta manera podrás estructurar tus ideas de manera coherente y evitarás desviarte del tema principal.
Antes de comenzar a redactar te recomendamos crear un esquema o plan que te servirá como guía durante la escritura. Divide tu ensayo en secciones o párrafos principales, y organiza tus ideas de manera lógica. Esto te ayudará a mantener una estructura clara y coherente en tu ensayo.
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Un ensayo está dividido en tres partes, todas fundamentales:
Esta es la parte inicial de tu ensayo; tiene como objetivo captar la atención del lector y presentar el tema que vas a desarrollar. No debe tener más de 300 palabras (un párrafo o máximo dos). No obstante, hay temas que exigen una extensión mucho más amplia debido a su capacidad de desarrollo, otras no.
Ten presente que la introducción es un abrebocas, un espacio para darle al lector una idea del tema que vas a tratar y, si lo consideras necesario o con una función aclaratoria, puedes poner aquí también la estructura y el orden que manejarás en tu ensayo.
El desarrollo es la parte central de tu ensayo y engloba tu argumentación principal. Aquí es donde debes exponer tus ideas de manera clara y coherente, respaldadas por evidencia y ejemplos. Cada párrafo debe abordar un punto principal, que luego debes desarrollar y respaldar con información relevante. Es importante que utilices conectores para asegurar la fluidez y coherencia en tu escritura.
En esta sección de tu ensayo es fundamental que respaldes tus argumentos citando a autores, ya que debe contar un rigor académico.
Es la parte final de tu ensayo y tiene como objetivo cerrar tus argumentos y reafirmar tu posición. En esta sección debes resumir brevemente tus puntos principales y reafirmar tu tesis. Además, puedes incluir alguna reflexión final o una llamada a la acción para generar impacto en el lector.
Ahora que ya tienes clara la estructura, hay una sería de consejos para hacer un ensayo que te ayudarán a mejorar la calidad del resultado, plasmar tus ideas y, en definitiva, sacar excelentes calificaciones.
Ya lo habíamos mencionado en la fase previa, pero es valioso que lo recuerdes porque al investigar todo lo necesario sobre el tema de tu interés hará que estés preparado para defender tu punto y los contraargumentos que puedan existir. Debes asegurarte de que sea información fiable.
Seguro en la biblioteca de tu universidad podrás acceder a grandiosos ejemplares, también podrás utilizar internet como herramienta para tus búsquedas, solo debes ser cuidadoso y confirmar toda la data que allí encuentres.
Empalma tus teorías con la perspectiva de otras personas para identificar tipologías, conceptos y demás. Adicionalmente, vas a reconocer diferentes estilos para abarcar las temáticas y cómo puedes desarrollar el ensayo en general.
El ensayo no pretende que agotes todos los recursos o todas las infinitas posibilidades que surgen con respecto a un tema. Es mejor que enfoques todos tus esfuerzos en una parte del mismo. Evita escribir párrafos de otros aspectos para que la información no quede inconclusa.
Bien lo mencionamos antes. Así que recuerda que por más objetivo que sea tu ensayo, siempre es recomendable que después de la conclusión incluyas un párrafo que lleve a la reflexión e intente que el lector evalúe las perspectivas.
Es fundamental utilizar un lenguaje claro y preciso al redactar tu ensayo. Evita palabras o frases ambiguas que puedan dar lugar a interpretaciones confusas. Emplea un vocabulario adecuado al nivel de tu público y evita términos técnicos o especializados que puedan dificultar la comprensión.
Asimismo, para hacer tu ensayo más interesante y evitar la monotonía, es recomendable variar la estructura de tus oraciones. Alterna entre oraciones cortas y largas, utiliza diferentes tipos de construcciones gramaticales y evita la repetición excesiva de palabras
Una vez que hayas finalizado la redacción de tu ensayo, es fundamental dedicar tiempo a la edición y revisión.
Lee tu ensayo académico en su totalidad y verifica que la estructura y la organización sean coherentes. Asegúrate de que tus ideas estén presentadas de manera lógica y que exista una conexión clara entre cada párrafo y sección.
Es importante que revises tu ensayo en busca de errores gramaticales, ortográficos y de puntuación. Por lo que es necesario que prestes atención especial a los errores comunes como la concordancia verbal, la colocación de tildes y la puntuación adecuada.
En este caso te recomendamos leer tu ensayo académico en voz alta para verificar la claridad y fluidez en la escritura. Asegúrate de que tus ideas se entiendan fácilmente y de que las transiciones entre párrafos sean suaves y coherentes. Si encuentras alguna frase o párrafo confuso, reescribe para mejorar la comprensión.
Ahora que sabes cómo escribir un ensayo académico, esperamos que sigas el paso a paso y puedas hacerlo con facilidad cuando te toque. Recuerda que, si quieres más información de interés sobre la vida académica, programas y métodos de estudio, puedes diligenciar tus datos en el formulario que está a tu derecha y no perderte ninguno de nuestros artículos.
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