Nacemos, crecemos, estudiamos, buscamos empleo, continuamos buscando empleo, seguimos buscando, conseguimos y morimos: es lo que se nos enseña desde que somos niños. Un buen empleo es sinónimo de estabilidad económica y la posibilidad de lograr nuestras metas personales a través de la retribución monetaria. Muchos buscan empleo desde jóvenes y lo complementan con los estudios mientras que otros esperan a graduarse para ejercer su profesión.
El debate recae en cuál es la mejor forma de buscar empleo. El internet ha puesto a nuestra disposición portales para buscar trabajo según nuestros deseos y necesidades. Seguramente tienes un perfil creado en alguno de estos portales o quizá estás considerando abrirte uno. En todo caso, su función es la misma: buscar y encontrar camello.
Ahora bien, existe otra manera virtual de buscar y conseguir empleo: LinkedIn. Las redes sociales fueron creadas cada una para cumplir una función específica; en el caso de LinkedIn, su razón de ser está destinado a poner en contacto a sus usuarios con empresas donde puedan aplicar a vacantes disponibles. ¿La diferencia con otros portales de empleo? LinkedIn tiene todos los beneficios de una red social.
Fundada en diciembre del 2002, LinkedIn es una red social con herramientas para generar relaciones profesionales. Es considerada una excelente forma de conseguir alianzas estratégicas y trabajar el marketing personal para ser más codiciado en el mercado digital.
Aunque en los últimos años su popularidad y uso han incrementado, sigue siendo una red social poco explotada, pero es momento de perderle el miedo y crearte un perfil en LinkedIn para darle un giro a tus búsquedas profesionales. Aquí te compartimos todas las ventajas de hacerlo:
Oportunidades: LinkedIn es una bolsa de empleo virtual en la que puedes inscribirte en diferentes procesos de selección usando filtros de búsqueda o seleccionando la opción “Anuncios de empleo”. Puedes contactar directamente a líderes y referentes de tu industria mientras investigas acerca de tus campos de acción.
Una red social dedicada al trabajo: como comentábamos antes, LinkedIn tiene todas las ventajas de una red social. Tienes la oportunidad de hacer publicaciones multimedia, compartir fotos, estados, gif, usar emojis, recomendar y comentar contenido de tus contactos. Incluso puedes promocionar tu perfil o armar estrategias pagas que te ubiquen en el radar en el cual deseas que te encuentren; trabajando tu marca personal.
Consultas online con profesionales afines: en LinkedIn puedes hacer grupos en los cuales puedes compartir y recibir información aterrizada a tu perfil profesional. Además, puedes ver otros perfiles afines al tuyo para ver qué hacen o cómo llevan la cuenta para mejorarlo en la tuya.
Tú y los demás: haz networking, déjate localizar y sé visible en el mundo laboral gracias a esta plataforma. LinkedIn te permite contactar de manera directa a empresas y otros profesionales para establecer relaciones y contactos de calidad que te permitan conocer la estructura empresarial a la cual perteneces.
La reputación lo es todo: Un perfil en LinkedIn debe nutrirse, cuidarse y enriquecerse. Una buena imagen en esta red social reforzará tu reputación y aumentará las recomendaciones al contenido que compartas y la validación de tus aptitudes por parte de ex compañeros de trabajo o conocidos. Como recomendación, comparte contenido acorde a esta plataforma, que sea profesional, con un lenguaje respetuoso y en sintonía con tu carrera y tu lista de contacto.
Hoja de vida online: Sube todo, absolutamente todo a LinkedIn. Desde tu experiencia laboral, hasta tu preparación académica, cursos, habilidades, conocimientos adicionales, ubicación, contacto, enlaces a blogs o portafolios digitales. La idea es mantener tu perfil actualizado, organizado y deseable.
LinkedIn es una red social con un potencial increíble. Si quieres moverte en el mundo profesional, sin duda alguna debes considerar crearte un perfil aquí y gozar de todas las ventajas y beneficios que te ofrece.
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