Seis consejos para hacer del aprendizaje en casa un espacio amigable para los niños

Es innegable que la contingencia actual a causa de la Covid-19 obligó a todos los actores que hacen parte del aprendizaje de los niños a reinventarse, exigiendo adaptarse a nuevos cambios en materia de educación que en la actualidad se desarrolla mediada por tecnología.

Según cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU) alrededor de 1.370 millones de estudiantes vieron interrumpidas sus clases presenciales a nivel mundial, lo que llevó a que se generaran nuevos escenarios educativos, siendo de gran importancia destacar que la población infantil es de las grandes afectadas ante la crisis, ya que en su proceso académico es indispensable el contacto no solo con sus compañeros sino con ambientes de aprendizaje.

Cabe destacar el papel de la tecnología en estos tiempos, ya que a través de ella los niños pueden acceder a imágenes, sonidos, juegos y simulaciones que hacen más didáctico su aprendizaje, sin embargo en el proceso entra en juego las clases tradicionales que actualmente se desarrollan a través de la presencialidad mediada por tecnología y el tiempo de los padres de familia que sumado a las responsabilidades laborales deben cumplir con el papel de docentes en casa.

Es por ello que Yanelis Yaneth Rimon, directora del programa de Licenciatura en Educación Infantil de Areandina comparte los siguientes consejos para hacer del aprendizaje en casa un proceso más amigable para los niños:

1. Mantener las rutinas: A pesar de que no estén asistiendo a clases presenciales es importante mantener rutinas donde se respete los horarios de clases, de comidas, de lecturas y juegos.

2. Facilitar concentración: Es importante que los niños desarrollen sus actividades académicas alejados de distracciones tales como juguetes, televisión o ruidos.

3. Organización: Establecer estrategias de gestión de tareas, actividades y responsabilidades en casa.

4. Contar con todas las herramientas que permiten el desarrollo de actividades académicas a la mano, ello con el propósito de mantener la concentración de los niños en sus tareas.

5. Pausas activas: Se debe respetar los tiempos. Establecer espacios de estiramiento, juegos y descanso son claves para optimizar la realización de las actividades.

6. Ayudarlos a mantenerse motivados y positivos: se deben implementar metas realistas, permitir recompensas y dar importancia a su trabajo y logros.